Como sí fuera ayer...

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Hola bloggeros, hace mucho tiempo que no os cuento nada, por eso he decidido hacer este post con un viaje que para mi ha sido inolvidable.
En mayo hará un año y tengo que reconocer que repetiría sin pensarme.

Fue a la ciudad más de moda, Londres.

Llegue un miércoles por la tarde, mejor dicho por la noche. Hice noche en un hotel a pocos kilómetros del aeropuerto, para poner rumbo bien temprano a Londres, llegué a la capital a las 10 y quizás ese día ha sido el más impactante en mi vida, aunque también el día que llegue más cansada al hotel, con dolor de todo pero ilusionada.
Primeras paradas fueron los monumentos más importantes:

El barrio chino, Buckijam Palace, Picadilli,  trafalgar square  

 Y para acabar el día también os recomendaría que fueseis al Cover guarden, un mercado precioso para ver con la poquita luz que os da londres.

Para el segundo día me deje un lugar mágico, los múltiple mercadillos de Candente Town.

Es como sí fuese un cuento, todo lo imaginable está colgados de las diferentes tiendas.

 

Allí podréis comer en montones de sitios.

Había visto casi todo pero me faltaba un lugar importantísimo el puente de Londres, es increíble es mucho más impresionante en persona que en fotos.

Otro día más para tener siempre en el recuerdo...

Me deje el sábado para algo que es obligado hacer en Londres, ir de compras por las dos grandes avenidas Oxford Street y Reye's street.

Os recomiendo que veáis las tiendas que no podéis encontrar en España, las tiendas de juguetes son mágicas y encontrareis millones de ropa de todos los estilos.

Después de este viaje que duró casi cinco días ( el resto del día siguiente volvi a ver lo que más me gusto) toco poner rumbo a casita...

Nos vemos pronto...